Seamos sinceros, una de las cosas más difíciles de la paternidad es la falta de sueño, ¡tanto para los niños como para los padres! Aunque puede llevar mucho tiempo crear rutinas para la hora de dormir, estas mejoran el sueño, ayudan a los niños a cuidar de sí mismos e inculcan independencia y responsabilidad. 

Aunque cada familia tiene su propio horario para las rutinas antes de acostarse, hay prácticas diarias que pueden ayudar a lograr que los niños se vayan a dormir.

1. Comprometerse a una rutina nocturna

Los niños aprenden con rutinas estables y predecibles. Establecer una rutina nocturna para que tú peque la complete antes de acostarse le ayudará a comprender lo que le espera cada noche. Al poco tiempo, los niños anticiparán su rutina nocturna, lo que hará que se resistan menos a ir a dormir. 

Con una rutina nocturna, los niños comprenden laos pasos al prepararse para dormir: cada uno se pone la pijama, se lava los dientes, se lava la cara, lee un libro y se va a dormir a su cama. 

Además, ¡la rutina nocturna no tiene por qué ser aburrida! Añade momentos que los niños esperen con impaciencia, como el yoga de las buenas noches o canciones para la hora de dormir que marquen la pauta mientras se ponen la pijama y se lavan los dientes.

2. Conseguir que los niños duerman en su propia habitación

La lucha por conseguir que los niños se vayan a dormir a su propia cama es constante. Esta transición puede ser difícil tanto para el niño como para sus cuidadores.

La Dra. Gablehouse, pediatra jubilada y miembra de nuestra Junta de Educadores, sugiere ser firme, coherente y reconfortante con los niños durante todo este proceso. 

Los padres también pueden motivar a sus hijos a dormir en su propia habitación. Prueba emocionarle por probar su cama de “niño o niña grande” y a incluirle en la decoración de su espacio privado para dormir.

3. Crear un entorno adecuado para dormir

Al dormir, es necesario crear el ambiente adecuado. Los niños no quieren perderse la diversión… ¡sobre todo si ven que la tele está encendida y todos pasan tiempo sin ellos! 

Una hora antes de acostarse, intenta bajar la energía de la casa utilizando una iluminación suave y tenue. También puedes ir bajando el volumen y el brillo de cualquier dispositivo.

Puedes crear un entorno adecuado para el sueño con estos consejos:

• Mantener las pantallas fuera de la habitación del niño por la noche y evitar el uso del teléfono o la tableta en las horas previas a la hora de acostarse.
• Mantener su habitación oscura, a excepción de su tenue luz nocturna en caso de que la necesite. 
• Mantener su habitación a una temperatura fresca, no fría, durante toda la noche.
• Poner música tranquila e instrumental o un aparato de sonido para bloquear los ruidos que puedan despertarle y alterar su ciclo de sueño.

El sueño y Lingokids

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¿Qué consejos tienes para conseguir que los niños se duerman? 

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